
La última cinta de los Hermanos Wachowski es, sin duda, la peor. Un despliegue de efectos especiales que dejan con la boca abierta pero al que no acompaña una trama del mismo nivel. Jupiter Ascending es una película de ciencia ficción contada a través de la historia de la princesa en apuros que pierde al espectador en el primer momento pero que acaba siendo entretenida en todo su recorrido.Lo cierto es que no iba muy convencido de que Jupiter Ascending fuera a suponer un antes y un después del cine de los hermano Wachowski, que tras The Matrix y las secuelas, no han sorprendido con las diferentes apuestas propias que han llevado a la gran pantalla. No sé si, por desacierto o demasiada ambición, la última cinta de los hermanos que cambiaron el cine con Matrix, ha resultado un derroche visual que ha terminado por aplastar a la historia que debería ser obligatoria en los tiempos que corren: Jupiter Ascending peca del tópico amor espacial que uno no esperaría de los mismos que nos ofrecieron guiones de primera con Matrix, V for Vendetta y en menor medida, Cloud Atlas.
A simple vista hay muchos elementos en Jupiter Ascending que no encajan, y el uso constante de clichés y chistes graciosos -estaría bien en este apartado recordarle a Kunis que no está doblando a Meg Griffin- rompen los pocos y casi inexistentes momentos de tensión. Si alguien me pidiese definir Jupiter Ascending en una frase lo haría como una suerte de Twilight espacial. Y es que el problema que tiene la cinta de los Wachowski es que no termina de afianzar ninguno de los puntos en los que se apoya.
Desde luego el planteamiento inicial era bastante bueno, pero sin motivo aparente los Wachowski se han empeñado en convertir esta cinta en una suerte de historia de amor que han edulcorado con viajes espaciales y una puesta en escena espectacular. Y es que desde los primeros momento uno se da cuenta que las piezas no encajan y que, tanto el trasfondo como la historia principal, están metidos con calzador: el abuso descomedido de personajes diferentes con cambios constante en los escenarios no hacen sino aumentar esta sensación de falta de armonía, a la que además se unen algunas caras conocidas que desde luego no han tenido, con Jupiter Ascending, su mejor papel.
Como decía, si dejamos aparte la problemática que presenta una historia tan pobre, el resto de la cinta de los Wachowski lo cierto es que funciona: la puesta en escena, como viene siendo habitual con el resto de película de los hermanos, sigue dejando con la boca abierta, pero no acaba de ser suficiente. Jupiter Ascending podría haber sido mucho más, pero al final se ha quedado en un suerte de película de ciencia ficción en la que Mila Kunis es -casi- el único atractivo, y eso es un problema para el historial de Ana y Andy Wachowski, confirmando la tendencia de que el cine de ambos hermanos, va a peor.La historia de Jupiter Ascending se plantea en sí misma como un cliché: la princesa (literalmente) necesita ser constantemente rescatada por un peligroso legionario y perseguida por un malo malísimo. Un cuento de hadas en el espacio con mucho CGI y naves espaciales imposibles. Lo cierto es que el Jupiter Ascending este sistema funciona. La cinta es bastante entretenida en casi todo su recorrido, con copiosas escenas de acción a lo largo de la misma y con algunos momentos divertidos que los más puristas dirán que sobran pero que dan un respiro al espectador. El problema de querer re-contar historias utilizando los mismos argumentos es que, o se es muy bueno, o se produce algo que acaba relegado al olvido.
Con Jupiter Ascending ha pasado algo así. Se podría haber contado la historia de la princesa de un modo más armonioso evitando confundir constantemente al espectador y se podía haber obviado gran parte de la trama. Al final, acaba haciéndose bastante lenta y acabamos cansándonos del casi, pero no de la princesa en apuros. Para que nos hagamos una idea, Lana y Andy Wachowski ha creado un batiburrillo de todas las cintas de ciencia ficción de los últimos años sin mesura ni cordura y le han añadido un toque de identidad propia en forma de efectos digitales y postproducción
Por seguir con la trama, la falta de armonía es quizás su mayor problema. Se presenta al espectador de forma demasiado rápida, nada clara y con cambios constantes que no hay tiempo de asimilar, por lo que los pequeños momentos de lucidez son casi de agradecer para al final, después de marearnos por los confines del universo, salvar a la princesa. Y es que esos confines del universo nos gustan, están tan bien pensados y presentados que casi dan ganas de explorarlos, por eso, lo que más molesta es que se hayan dejando en segundo plano los mejores elementos de la cinta para dar protagonismo a la historia de amor forzada.
Lo cierto es que como decía, el universo de Jupiter Ascending es realmente bueno, y goza de una épica que ya les gustaría a más de una producción multimillonaria, pero al querer los Wachowski -o ser obligados por producción- hacer de la historia de amor el corazón de la película, se rompe este esquema. Y es que a primera vista, el mundo presentado por Lana y Andy Wachowski pide a gritos una secuela, pero el planteamiento de la cinta lo convierte en un imposible. Todos y cada uno de las piezas por separado constituyen el germen de una buena historia, pero el ritmo errático y la falta de coordinación entre ellos empañan un planteamiento que inicialmente estaba a la altura de las mejores épicas del género.
Si dejamos de lado la trama y nos centramos en la puesta en escena, lo hermanos Wachowski saben de sobra que en este apartado no tienen competencia. Todos y cada uno de los detalles técnicos de la cinta son perfectos, desde las animaciones hasta las recreaciones de los mundos y los personajes. La combinación de colores, los contrastes entre la Tierra y los distintos planetas que se nos presentas son muy buenos, y las escenas de acción pueden presumir de unos buenos efectos a los que acompaña un sonido espectacular -en ocasiones algo elevado-. En general, este buen hacer en el apartado técnico es lo que viene a salvar el resto de problemas de la trama, y es lo único que asegura que salgas del cine con un buen sabor de boca. Eso sí, que una vez salgas del cine quieras volver a repetir con Jupiter Ascending, es otra cosa.
Al final, este apartado técnico eclipsa a la moralina y a la filosofía metida a calzador sobre la importancia y el sentido del ser humano, dos argumentos vienen a ser la moraleja de la trama, y todo ello edulcorado con una historia de amor totalmente innecesaria. Jupiter Ascending tiene todos los ingredientes de una película de ciencia ficción, pero desde luego le falta mucho para convertirse en una de las películas del genero.
6Jupiter Ascending lo tenía todo para convertirse en un gran cinta de ciencia ficción, pero al final ha terminado relegada al un gran despliegue audiovisual pero a un pobre guión. La historia se cuenta de forma rápida y errática y los pocos momentos en los que de verdad demuestra su potencial son por el despliegue de efectos especiales y de universos de ciencia ficción.
Si no fuera por algunas caras conocidas, y por llevar el sello de los Hermanos Wachowski muchos dirían que lo vale nada, pero lo cierto es que, a pesar de no ser una película que sorprenda a nadie más allá de la fotografía y la puesta en escena, acaba resultado entretenida, pues gracias a las constantes escenas de acción, mantiene un ritmo que, de otra forma, la convertiría en la peor producción de los Hermanos Wachowski, pero que por los pelos, acaba salvando el tipo.- Puesta en escena. - Personajes y química entre Kunis y Tatum. - Efectos visuales - Banda sonora. - Narrativa muy compleja. - La trama se presenta muy acelerada sin dar tiempo a asimilar lo que se está viendo. - Guión pobre que abusa de clichés.